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Reformismo

La fotógrafa, por los soportales, se detiene en esta especie de campus que se abre entre paredes. Misceláneo, polícromo y mural. A pie de calle. La panadería de la izquierda parece también pintada, pero no; además, no es una panadería, sino un bar de copas, anexo al patio y claustro complutense pintados. En el horario diurno, a Cisneros, ataviado también en escala de azules, como la panadería, se le ve surgir como un trampantojo de autorictas, escultórico, sin mirada y severo de rictus, enraizado en la acera y enramado desde su cabeza, de la que crecen reformas, ideas y administración. Por la noche, Cisneros alterna entre el obrador y la marcha. Podía coronar el retrato del cátedro esta leyenda: “No sólo de pan vive el hombre”.

Fotografía: Teresa Rodríguez

Texto: Bernardo Sánchez

 

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