La fotógrafa, hace un año. Como todos nosotros. De todos nosotros hace un año. En todos los sentidos. Quiero decir los cinco sentidos: la vista, que es la que trabaja en el caso de una fotógrafa, pero también el tacto, el oído, el olfato y el gusto. La pesadilla ha sido perderlos en algún momento de este año. Por causa invisible. Una fotografía diaria, enfrente de nuestros semejantes, certificaba la presencia: la suya era la nuestra. Y viceversa. Mirar, buscar, ventana a ventana. Señales de vida. Mientras que los que luchaban por nuestra vida, en todos los sentidos, se encontraban fuera de campo. Por eso les aplaudíamos, un aplauso de larga exposición, más larga que la instantánea fotográfica, que era un reconocimiento, un seguimos.
Fotografía: Teresa Rodríguez
Texto: Bernardo Sánchez